La Municipalidad de Villa Elisa junto a APA Patitas en la Calle invita a la comunidad a reflexionar sobre el accionar que tenemos en relación a nuestros perros.
Tener una o varias mascotas implica un gran compromiso y responsabilidad. No asumir ese compromiso, descuidando a la mascota y exponiéndola a riesgos propios o de terceros, es hablar de abandono e irresponsabilidad. Por ello, antes de adquirir un perro debemos tener en cuenta varios aspectos como: su atención y cuidado diario, una correcta alimentación, contar con espacio físico de acuerdo al tamaño de la mascota. Considerando todo esto, la decisión de incorporar una mascota al hogar debe ser tomada por el grupo familiar conviviente, para que todos estén involucrados en su atención.
Este año, desde la Municipalidad de Villa Elisa y APA Patitas se logró concluir con la construcción de un nuevo canil en el predio lindante al Corralón Florentino Chaulet que cuenta con instalaciones óptimas para alojar a los perros abandonados y además se les provee de la alimentación diaria y vacunación necesaria. Pero la existencia de caniles en buenas condiciones no implica que los vecinos puedan desentenderse del cuidado de sus perros, sino por el contrario, se trata de lograr un lugar donde contener sólo a aquellos perros que, por distintas razones no cuenten con un hogar, para evitar que generen inconvenientes en la vía pública.
En esta labor respecto a los perros en nuestra ciudad, APA Patitas, además de conseguir los alimentos mediante el aporte de comercios, empresas y vecinos, ofrecen castraciones, que son cubiertas por el Municipio local, para aquellos casos en los que los propietarios de mascotas no pueden abonar el costo de la intervención quirúrgica. Por otro lado, se promueve la adopción de perros en lugar de la compra, para lo cual los domingos por la tarde, un grupo de representantes de APA se ubican frente a la Plazoleta del Inmigrante ofreciendo perritos en adopción.
La forma en la cual nos comportamos con nuestras mascotas habla de cómo somos, como personas y como vecinos. Ser responsables con nuestras mascotas es un acto de amor con ellas y de respeto por los demás.
